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Política
La juez, María Eugenia Herrero es el centro de todas las miradas
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Jueves, 17 de agosto de 2017

Corrientes (17-8-17): La tarea de magistrada con competencia Electoral nunca fue fácil. Menos en Corrientes, donde muchas veces se cuestionó al histórico Pacto Liberal Autonomista, aunque este cuidaba más a sus jueces. Los exponía sólo en caso de estricta necesidad y de manera excepcional en cada turno. En los últimos años, los políticos han judicializado hasta la interpretación del Himno Nacional, forzando situaciones que incomodan a la magistratura. Ayer, la Juez Electoral rechazó una impugnación que perseguía la participación del PL. Hace nueve días se vio obligada a otorgar Personería, por imposición del Tribunal superior, a un partido que, a su criterio, no estaba en condiciones y debió hacerlo a contrarreloj, en un par de horas. Aún así, dejó por escrito un criterio que no será fácil rebatir como jurisprudencia de la Corte provincial.

Los políticos se pelean, se arreglan, se vuelven a pelear y en las medias muchas veces quedan jueces y fiscales expuestos a la opinión de la gente. Parece lógico entonces que se preserven, pudiendo dar razón de sus fallos. A la postre, es el cuero, el prestigio y la trayectoria de cada uno de ellos lo que es juzgado por la gente, que cada vez más participa de algo que antes estaba reservado al mundo tribunalicio. Todas las cosas tienen su límite y así pareció entenderlo la doctora Herrero. Aunque aceptó la discutible teoría de la obediencia debida a la manda de un Tribunal superior, dejó por escrito sentado un criterio difícil de soslayar en lo que es la fijación de precedentes que perduran en el tiempo.

Ayer, el liberalismo festejó su vuelta al ruedo político. El más antiguo de los partidos del país estará en los comicios del 8 de octubre, salvo que el diablo meta la cola.

Los que no conocen el paño aseguran que hubo ya sutiles mensajes desde la Iglesia Católica para al menos tres de los ministros del Superior Tribunal, para que se asegure un proceso electoral menos conflictivo que el que se está desarrollando.

Lo cierto es que ayer se dio otra señal importante. El Partido Liberal podrá participar. Superó una impugnación que apuntaba a excluirlo de la alianza dispuesta por sus órganos partidarios. (Ver nota aparte).

Aun así, lo que sigue dando qué hablar es la situación generada por la supuesta creación, en tiempo récord, de un partido que se aprobó manu militari por orden superior, con la contradicción de la Juez Electoral. Consciente del precedente que se podría generar, dejó por escrito sus observaciones.

Con ello apuntó a cubrirse. A preservarse ante la crítica que ello podría generar y el desgaste que provocan acciones que no puedan sostenerse. Al actuar como lo hizo, puso en apuros a las instancias superiores, que ahora deberán confirmar o revocar el otorgamiento de la Personería a un partido cuyo objeto claro parece ser el de confundir la voluntad del elector, induciendo a que opositores voten al oficialismo creyendo que lo hacen por Camau.

En el fondo, quizás, una muestra de debilidad de los que gobiernan, que sin medir la relación costos beneficios algunas veces apelan a acciones que dejan más para perder que para ganar, como lo fue el fallido intento de proscribir al Intendente de Mercedes.

Quizás por ello ayer, el postulante oficialista a la Intendencia de Goya, Ignacio Osella asumió una actitud positiva al saludar la posibilidad de competir contra el intendente, Gerardo Bassi, quien va por su reelección y quien también está en la mira de la ofensiva colombista, más allá de que a partir del caso Cemborain, del caso Menem y del hartazgo de sectores del Poder Judicial hay un parate que los ha dejado recalculando.

Importa señalar que días atrás, cuando desde el Gobierno nacional se avanzó con el intento de impedir la candidatura de Menem, su oponente, el ex ministro de Defensa, Julio Martínez salió a expresar su contrariedad, de la misma forma que ayer lo hizo Osella. Los resultados de las Paso le dieron la razón. Carlos Menem arrasó en las elecciones del domingo, recibiendo el apoyo claramente mayoritario del pueblo riojano.

En el caso del sello de goma creado para competir con la sigla Camau dentro de ECO, la cuestión sigue en manos de la juez Herrero. Tiene a resolver un recurso in extremis mediante el cual se le pide que revoque su resolución, haciendo prevalecer su criterio en función a que los jueces no tienen obediencia debida cuando se trata de violar la Ley o soslayar las cuestiones fácticas que hacen a la interpretación del Derecho. Luego del fallo de la doctora Herrero, cualquiera sea, la parte perdidosa apelará a la Cámara Electoral y, salvo que los impulsores desistan, la causa llegará al Superior Tribunal, donde los números nunca son fáciles de anticipar. No hay alineamientos automáticos y más de una vez los supremos han privilegiado la necesidad del consenso. De hecho, un paso importante que debe destacarse es que se ha impuesto el sano criterio de que voten los cinco ministros, dejando atrás una práctica perversa que rigió durante las presidencias de Eduardo Farizano y Carlos Rubín, práctica que pasaba por el voto de sólo tres de los cinco ministros.
El Libertador


Jueves, 17 de agosto de 2017

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