Bs. As. (12-8-25): El Presidente presentó un escrito plagado de argumentos insólitos en la causa que le inició el niño por agravios. Dijo que actuó no como presidente, sino en el uso de su libertad de expresión; y que Ian es un activista, por lo tanto debe soportar su violencia verbal. Las excusas parecen dirigidas también a mitigar daños en la causa $LIBRA, donde está en discusión su uso de la cuenta de "X" como jefe de Estado. Constitucionalistas con miradas diversas fueron categóricos al señalar su irresponsabilidad.
Por Irina Hauser
Javier Milei se niega a eliminar un tuit que publicó el 1 de junio de este año en el que desacreditaba a Ian Moche, un niño de 12 años con autismo, conocido por sus acciones para difundir y concientizar sobre esta condición. Los insólitos argumentos que presentó el jefe de Estado en la demanda judicial que le inició el chico parecen más enfocados en controlar las consecuencias de la causa penal por la criptoestafa $LIBRA y en seguir usando las redes sociales como si no tuviera responsabilidades propias de su cargo (y así, por ejemplo, atacar a opositores o difundir noticias falsas). Su planteo tiene varias aristas. Por un lado, vuelve con la teoría de que no tuitea como Presidente de la Nación sino como un ciudadano cualquiera y que lo hace en ejercicio de su libertad de expresión (que, según él, intentan cercenarle al denunciarlo). A la vez dice que los derechos y el interés superior del niño no pueden restringir el debate público, a lo que agrega que el chico es un activista y como tal debería soportar sus agresiones. Da una vuelta más: sostiene que en realidad él solo retuiteó para criticar a un periodista y que ahora es una víctima de la cultura de la cancelación.
"Acá el problema es que el Presidente en ejercicio del cargo retuiteó manifestaciones agraviantes para los derechos de un niño que tiene una discapacidad. Frente al agravio, se le pidió que elimine lo que publicó. Pero él desconoce el carácter de niño vulnerable de Ian, quien defiende y hace visibles los derechos e las personas con discapacidad", señaló el abogado constitucionalista Andrés Gil Domínguez, quien había presentado la demanda en nombre del niño y su mamá. "Lo que dice Milei es grave: que un niño que pide que elimine algo gravoso para sus derechos afecta su libertad de expresión. Es una noción básica que la libertad de expresión fue pensada para proteger a las personas frente al Estado y no al revés. El planteo es contradictorio con toda la historia de la libertad de expresión y los derechos humanos", agrega.
Además del escrito presentado por Milei, representado por el abogado Francisco Oneto, entregó otro la Procuración del Tesoro, que ese el cuerpo de abogados del Estado, enfocado --otra vez-- en que Milei no se expresó como Presidente. En relación a la cuenta de "X" usada por Milei dijo: "Desde ningún punto de vista podría ser considerada una cuenta pública oficial del Estado nacional o del Poder Ejecutivo nacional o de Presidencia de la Nación, ni tampoco constituye un canal oficial de comunicaciones públicas o institucionales". Por eso, además, dicen que Ian Moche no está legitimado para accionar contra el Estado, porque "no se dirige contra un acto u omisión del Poder Ejecutivo - Estado Nacional". En función de esto, pide desestimar el amparo.
El primer problema con el que se choca ese enfoque es que ni el juez de La Plata, donde se presentó la demanda, Alberto Recondo, ni el fiscal del caso Oscar Julio Gutiérrez Eguía, se declararon incompetentes. Es decir, aceptaron la competencia federal, que es la que atañe a Milei como el más alto funcionario del Poder Ejeutivo. Es más, el fiscal fue categórico al dictaminar: “Si bien nos encontramos en el ámbito del derecho no penal, vertida la publicación cuya eliminación se intenta, en la red social X, por el demandado en estos autos el Sr. Milei, en este caso en su rol de Jefe de Estado, verificado como funcionario tan en dicha red --escribió-- entiendo que la justicia federal resulta competente en razón de las personas". Para el fiscal no hay ninguna duda de que la cuenta de "X" de Milei está verificada en su carácter de mandatario.
¿Por qué el Presidente está empecinado en negar que ostenta ese cargo todo el día? Es decir, cuando tuitea también. Según explican varios especialistas a Página/12, es probable que las conductas que se le atribuyen agraven su escenario en todos los frentes judiciales.
"A los niños, niñas y adolescentes les cabe un plus de protección en su carácter de personas en pleno desarrollo. En cualquier conflicto de derechos entre un adulto (la supuesta libertad de expresión) y el derecho a la intimidad, identidad, trato digno, entre otros, de una persona menor de edad, el sistema jurídico se inclina por la satisfacción de derechos de este último. Un Presidente de la Nación tiene la responsabilidad reforzada de cumplir con esta manda constitucional-convencional", señala Marisa Herrera, abogada especialista en familia y niñez. "La actitud violenta hacia una persona doblemente vulnerable, por ser menor de edad y en situación de discapacidad, contiene ribetes más gravosos al provenir, no solo de un adulto, sino que esta persona es el presidente de la nación. Esta gravedad exige que la justicia esté a la altura de las circunstancias", detalla. "Lo que expresó el fiscal que interviene repercute en el caso que más preocupa, y debería por la gravedad de los hechos que se investigan, al Presidente, como lo es el conocido caso Libra", completa.
De este modo, la responsabilidad en agraviar a un niño, es más grave si viene del Presidente. En el caso $LIBRA, podría generar diversos delitos vinculados con ese cargo, y no únicamente una presunta estafa. Desde negociaciones incompatibles con la función pública, incumplimiento de sus deberes, abuso de autoridad y hasta sobornos.
La historia antes del tuit
En el contexto de los reclamos por la emergencia en discapacidad, Ian y su mamá, Marlene Spesso, habían contado en una entrevista en el streaming Gelatina que el director de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS), Diego Spagnuolo, le había dicho a ella en un encuentro en 2024 si había tenido un hijo con discapacidad era un problema de la familia, no del Estado. “¿Por qué yo tengo que pagar peaje y vos no?”, cuestionó Spagnuolo. Después que hicieron pública la significativa anécdota, el funcionario intentó desmentirla en televisión. Ian y su madre pidieron derecho a réplica y fueron al programa de Paulino Rodrigues. El niño incluso se angustió al decir que lo trataban de mentiroso.
Meses antes, desde el Gobierno habían plasmado esa misma crueldad que sus funcionarios desplegaban en privado nada menos que en el Boletín Oficial. Fue a través de la Resolucón 187/2025 de la ANDIS, que utilizó términos como "idiota", "débil mental", "imbécil" y "retardado" para referirse al colectivo. En esa resolución, el Ejecutivo endurecía los parámetros necesarios para acceder a una pensión por "invalidez".
Milei retuiteó con un texto propio algo que surgía de un posteo de la cuenta "@hombregrisxd". El posteo de ésta decía: "Pautino llevó a un nene con autismo para que opere contra Milei. Resulta que el nene, Ian Moche viene de una familia ultra kirchnerista y ya lo habían utilizado con Massa y Cristina Kirchner". Estaba acompañado de fotos del chico con el periodista Rodríguez, con Cristina Fernández de Kirchner y con Sergio Massa. El texto del retuit del Presidente decía: "Pautino siempre del lado del mal. No falla nunca al momento de operar en contra del gobierno. Siempre del lado de los kukas... no falla...".
Como suele ocurrir, luego venía una fila de nuevos posteos con hostigamientos y expresiones de descrédito. Nunca termina en un tuit de Milei que, la revés, suele ser el comienzo. Tampoco es cierto que Ian y su madre se hayan reunido exclusivamente con un sector de la política. Este mismo año había estado con la candidata a legisladora porteña Lula Levy, radical, alguna vez fue a merendar a la casa de Horacio Rodríguez Larreta y hasta lo había convocado a dar una charla en rosario el diputado libertario Nicolás Mayoraz.
"Una cuestión importante acá es si causó daño o no, sea como presidente sea como ciudadano. No hay dudas de que al darle tanta difusión a un post que pone a Ian Moche 'del lado del mal' es el primero que puede dañarlo. El twit dice 'Pautino' está "del lado del mal' con una foto al lado de Ian ¿De qué manera eso no es involucrarlo? Por cierto, es mentira que solo retuiteó al 'Hombre Gris', es mentira que no se refirió a Ian", señala el constitucionalista Sebastián Guidi. "Luego --analiza-- según le conviene, lo presenta como un niño manipulado por su abogado o como un activista que teine que tener la piel gruesa para soportar que se hable de él. Defiende su derecho a exponer a un nene y decir que está del lado dle mal como si se tratara de una guerra por la libertad de expresión", agrega. "La jurisprudencia de la Corte Suprema es muy restrictiva al permitir algún tipo de censura, como podría considerarse bajar un contenido de internet. Ahora bien, lo interesante es que justamente el caso en el que la Corte hace una excepción es cuando está en juego el derecho de un niño", explica Guidi.
Libertades
Aunque parezca una obviedad, un jefe de Estado no puede hacer cualquier cosa. "El presidente es el titular unipersonal de nuestro Poder Ejecutivo, es decir el funcionario de mayor jerarquía. Hay algunas acciones que pueden realizar todos los ciudadanos, menos algunos funcionarios, justamente en razón de su función y lo saben desde el momento en que aceptan su empleo: así, un juez no puede integrar el directorio de una sociedad anónima, un abogado del Estado no puede litigar contra el Estado, un militar en actividad no puede formar parte activa de un partido político. Hay otras limitaciones no taxativamente establecidas, pero éticamente impuestas, que los funcionarios más altos deben respetar y que hacen a la dignidad de su función", remarca el exjuez de la Corte Raúl Zaffaroni.
Sobre la discusión que introduce el Presidente respecto de la supuesta afectación a la libertad de expresión, Roberto Saba, profesor de derecho constitucional de la UBA, dice: "El presidente Milei tiene una concepción de la libertad de expresión en clave libertaria, que es contradictoria con el derecho a la libertad de expresión que protege la constitución. La libertad de expresión es una pre condición de la democracia y por ello su ejercicio está sometido a límites tendientes a asegurar un debate robusto. Cuando el presidente ataca con violencia una opinión crítica, sobre todo de alguien que se encuentra en una situación relativa de menor poder, tiene un efecto de silenciamiento no solo sobre el que recibe el ataque, sino sobre otros potenciales críticos que quizá opten autocensurarse. La democracia no es compatible con estos silenciamientos".
Milei se queja de la cultura de la cancelación, como si no denunciara a periodistas ni cuestionara a quienes piensan distinto a él. Guidi señala una paradoja: "Es el Presidente, tienen muchísimos medios de comunicación que le son leales, todo el mundo habla de lo que hace y dice, ¿quién lo está cancelando?".
"Por su puesto que el Presidente tiene libertad de expresión, pero cuando habla como Presidente lo hace con el poder que implica, por lo tanto sus frases y actos pueden ser violatorios de otras personas. En este caso lo hizo contra un niño, a quien amedrentó, de una forma muy vil y cobarde, ya no como presidente, sino como adulto", dijo la doctora en derecho Natalia Volosin.
Martes, 12 de agosto de 2025