Córdoba (9-9-25): En las últimas horas se confirmó el fallecimiento de Ezequiel Chirino, padre de Matías Chirino, el joven soldado del Ejército que murió en 2022 tras ser sometido a un “ritual de iniciación” en un regimiento de Paso de los Libres, Corrientes.


Había sufrido semanas atrás un grave accidente de tránsito cuando se dirigía hacia Holmberg. Desde entonces permanecía bajo cuidados médicos, pero su cuadro se fue complicando hasta que este lunes se produjo el desenlace fatal.

El pasado 11 de agosto, Ezequiel había protagonizado un grave accidente de tránsito en el ingreso a Holmberg, sobre la ruta nacional 8.

En el siniestro, que involucró a tres vehículos, sufrió un fuerte golpe en el pecho que obligó a su inmediata internación en el Hospital San Antonio de Padua de Río Cuarto.

Desde entonces permanecía bajo atención médica, hasta que su estado de salud se agravó en los últimos días y derivó en su fallecimiento.

Una vida marcada por la búsqueda de justicia

Desde la trágica muerte de su hijo Matías, Ezequiel se convirtió en un símbolo de la lucha contra los abusos dentro de las Fuerzas Armadas.

Estuvo presente en marchas, entrevistas y actos públicos en los que reclamaba que los responsables fueran llevados a juicio y que el caso no quedara impune.

Su figura, junto a la de su familia, transmitía la mezcla de dolor y coraje de un padre que exigía verdad y justicia.

Su fallecimiento golpea doblemente: primero, como una pérdida personal para quienes lo conocieron; y también en lo colectivo, porque deja un vacío en una causa que conmovió a todo el país.

La herida abierta del caso Matías Chirino

Matías tenía 22 años y era oriundo de Holmberg. Su muerte, ocurrida en la madrugada del 19 de junio de 2022, destapó una de las páginas más oscuras de la vida castrense reciente.

El joven aspirante a subteniente había sido obligado a beber en exceso durante una “bienvenida” organizada por oficiales superiores en el Grupo de Artillería de Monte 3, en Corrientes.

El caso derivó en procesamientos judiciales, un debate social sobre las prácticas de “bautismos” militares y un fuerte reclamo político para erradicar las violencias institucionales.

Una despedida cargada de simbolismo

La muerte de Ezequiel se produce mientras aún continúa el proceso judicial que busca esclarecer las responsabilidades por la muerte de su hijo.

Para muchos allegados, su partida representa un golpe emocional que revive la sensación de injusticia y desamparo.

La comunidad de Holmberg y de toda la región recuerda hoy a un hombre que, atravesado por la tragedia, no se resignó al silencio.

Su historia quedará unida para siempre a la de Matías, en una lucha que aún espera respuestas definitivas.

Con información de Telediario digital

Martes, 9 de septiembre de 2025