Por Carlos A. Pérego
“El peronista que se cree más de lo que realmente es, deja de ser peronista para convertirse en oligarca”, esta frase fue dicha hace casi 60 años por el mismísimo Gral. Perón, y siempre fue un espejo donde los peronistas debiéramos mirarnos para poder llevar adelante el proyecto de país que defendemos.
En tiempos en donde lo más importante es el proyecto político que se lleva adelante desde el gobierno nacional y que tenemos la obligación de instaurarlo en nuestra provincia, Corrientes, y en nuestra ciudad, Paso de los Libres, para que la igualdad, la justicia y la solidaridad sean derechos para todos y no para grupos determinados, debemos actuar con conocimiento, sentido común y básicamente entendiendo cual es el lugar que debemos ocupar. Hace pocos días el Presidente del PJ Fabián Ríos dijo claramente que “no se trata de nombres propios, sino de defender un modelo inclusivo”, y a eso se debe apuntar.
Cuando desde el PJ y el Frente para la Victoria se trabaja denodadamente para demostrar que con poco y nada se puede hacer lo que el gobierno local con mucho no logra, es una irresponsabilidad anteponer ambiciones personales, muchas de ellas desmedidas, a lo realmente importante que es justamente trabajar para la gente.
Es de conocimiento público que, por lo menos, dentro del PJ y del FpV existe una clara ambición de poder, no por el hecho del poder mismo, sino por la convicción íntima de la necesidad de acceder al gobierno para cambiar esta realidad que vivimos, por dicha razón son varios los precandidatos que pretenden contar con la consideración y el apoyo de la ciudadanía para lograrlo. Perón también nos enseñó que “cada militante tiene el bastón de mariscal en su mochila”, es por eso que todos tenemos el derecho de poder ser conductores, pero no todos tenemos la capacidad para serlo y es en ese sentido donde debemos tener la suficiente honradez intelectual para saber si realmente tenemos dicha capacidad, es una simple cuestión de ubicuidad.
Para lograr esa consideración popular se debe claramente contar con capacidad intelectual, preparación política y una gran dosis de humildad, para que justamente “uno no se crea más de lo que es”. Dentro del PJ nadie da letra a nadie, porque para hacerlo antes se debe tener la capacidad necesaria y debe haber un vacio de decisiones y dirigencial, y hoy por hoy dentro del PJ y del FpV las determinaciones políticas y las acciones a llevar adelante las toman el conjunto de la dirigencia que está haciendo posible que el sueño de cambiar la realidad de nuestra ciudad esté cada vez más cerca.
El candidato que represente al FpV será aquel que tenga el consenso necesario para permitir cumplir con el proyecto de gobierno inclusivo, y no aquel que pretenda serlo por imposición personal o por el dedo de alguien, esos tiempos ya fueron superados, hoy tenemos el ejemplo de la máxima dirigencia provincial, donde hay varios pretendientes al sillón de Ferré, pero que anteponen el proyecto a las apetencias personales, de hecho Fabián Ríos y “Camau” Espínola no competirán entre ellos y el candidato será aquel que permita ganar la gobernación, ellos o algún otro, hecho que se convierte en el mejor ejemplo a seguir, no valen más ni las historias personales, ni las historietas en algunos casos, ni las operaciones políticas ni mediáticas para llegar, solo vale lo que quiere la gente.
A partir que la “Casa del Pueblo, Dr. Néstor Kirchner” se abrió y, como no sucedió nunca, se mantiene abierta todos los días para atender, contener, educar, enseñar y solucionar problemas de la ciudadanía, nadie puede aducir ignorancia de los trabajos y acciones que se realiza desde el FpV, mucho menos discriminación dado que las puertas están abiertas para que todos vayan y, como sucede cotidianamente, para que cada militante se brinde en los trabajos que se realizan.
A pesar de los ataques, injurias y atropellos sufridos en los últimos tiempos por parte del Intendente Eduardo Vischi y varios de sus adláteres, y cuando muchos esperaban respuestas altisonantes, esa misma dirigencia a la cual nadie puede dar letra, decidió redoblar la apuesta de trabajo y le contestó con un nuevo operativo de ANSES gestionado desde el FpV, y llevado adelante justamente por aquellos a quienes se vio durante las dos jornadas atendiendo a la gente desde las primeras horas. Esa claramente es la premisa principal, trabajar para la gente, trabajar para el pueblo.
Dentro de los peronistas el axioma es claro “primero la Patria, luego el movimiento y luego recién los hombres” y ese orden no se cambiará, ya que quien pretenda subvertirlo claramente se está considerando más de lo que realmente es y por ende ya dejó de ser peronista porque se está olvidando que el peronismo es esencialmente popular.
Mucha agua todavía correrá y quienes pretendan ser los capitanes del barco deberán mojarse, embarrarse, definitivamente trabajar para ir cambiando desde ahora la realidad social de nuestra ciudad y para ello se necesita predisposición, abnegación, desprendimiento y básicamente, como ya se dijo, la humildad necesaria para interpretar las necesidades de nuestros vecinos y no pensar sobre la imprescindibilidad propia y/o pertenecer a círculos sectarios para obtener privilegios difamando a otros compañeros.
Hoy es el momento del trabajo, no de las fotos, es el momento de dar, no de pedir, es el momento de poner el pecho, no de esconderse, es el momento hacer, no montarse en lo que otros hacen, es el momento de estar con la gente, no simplemente decirlo, porque hoy es el momento de ser lo que uno es realmente no lo que uno se cree que es.
Ese es nuestro deber, es nuestra obligación como peronistas, pero básicamente como correntinos y libreños, para poder hacer que nuestra ciudad sea realmente grande y nuestros compoblanos vivan cada vez mejor en un proyecto de inclusión en donde no haya amigos y entenados, sino simplemente ciudadanos dignos y respetados.
Carlos Adán D. Pérego
Director Sur Correntino
Viernes, 15 de junio de 2012