Paso de los Libres (6-1-14): Lo que muchos libreños pensábamos que a partir de la asunción del Intendente Raúl Tarabini vendría algún tipo de cambio, sobre todo en lo que respecta a esa sensación de corrupción e impunidad que reinó durante la gestión Vischi, se está convirtiendo en una nueva frustración, los hechos inmediatos a partir de la asunción, la conformación del gabinete y los últimos de dejarse “apretar” por un funcionario, así lo corroboran. Si Tarabini no se decide a tomar en serio y hacerse cargo con todas las atribuciones su función de Intendente, pasará lamentablemente a la historia como el cómplice de los “kioscos” que manifestó desterrar apenas asumió. Vischi le dejó como herencia no solo un estado altamente sospechado sino que también el gabinete que garantice que sea él quien realmente gobierne, Tarabini ni siquiera pudo nombrar a su secretario privado.
www.surcorrentino.com.ar

El actual Ministro Coordinador, Eduardo Vischi, intentó elegirse por un tercer mandato en esta ciudad, llevando a uno de sus hombres de máxima confianza, el Secretario de Gobierno José “Chelo” Sincovez, como vice intendente, la justicia hizo cumplir la constitución y Vischi ya no podía participar encabezando la lista, su alfil, Sincovez, contaba con una altísima imagen negativa y una casi inexistente intención de votos, por las sospechas de innumerables actos de corrupción que lo llevó en los últimos años a amasar una pequeña fortuna con stud y caballos de carrera incluidos, razón por la cual Vischi opta por el concejal Raúl Tarabini, una persona de perfil bajo, prácticamente sin participación en la tarea legislativa, pero tenía el concepto de buena persona, y se convirtió en el único candidato de los varios que hizo medir Vischi que tenía algo de respaldo y aceptación de la gente, por dicha razón se inscribe la fórmula Raúl Tarabini – “Peteco” Vischi aunque ya a partir del diseño de la boleta se pudo advertir cual era el papel que le tocaría cumplir al candidato a Intendente, el nombre de Vischi , el vice, tenía letras casi 20 veces más grandes, es decir que siempre el elector fue “Peteco” y “el profe” Tarabini un mero actor de reparto. Cabe destacar que el propio candidato en declaraciones radiales, no más de 60 días antes de la elección, manifestaba que él no quería ser candidato puesto que no se sentía capaz de llevar dicha tarea adelante, a pesar de ello no soportó las presiones y finalmente aceptó.

Luego del triunfo lo lógico sería que el electo, y a sabiendas que Vischi tenía el destino cierto en el gabinete, tuviera una injerencia principal en todo lo que sean decisiones de gobierno ya que recaerían en su mandato, pero nada de eso sucedió, a veces, solo a veces, era invitado a reuniones de gabinete, pero sin voz ni voto, a tal punto que un una oportunidad cuando salió del despacho para atender su celular, no le abrieron más la puerta. Desde esos momentos se podía intuir que “el profe” cumpliría un papel muy secundario, solo pagar salarios y participar en los actos protocolares. Lo que siempre se dijo que el gobierno de Tarabini sería una continuidad de la gestión Vischi se estaba corroborando con todas las letras.

Si en algún momento el nuevo intendente se ilusionó que pondría en algo su impronta, todo quedó en eso, ilusiones, ya que a partir de la jura de él como alcalde y de Vischi como Vice, quien a los pocos minutos presentó un pedido de licencia para hacerse cargo de nombramiento provincial, corroboró con las primeras decisiones que tomó que seguiría, lamentablemente, cumpliendo el mismo papel que cuando era concejal.

“Peteco” le impuso que mantenga a casi todos sus funcionarios en los mismos lugares, principalmente en hacienda a Fabián Prado y en la Secretaría de Gobierno a José Sincovez, sus fieles alfiles que seguirían manejando los números y la política de acuerdo a las instrucciones venidas de Corrientes, a tal punto llegó la imposición que Tarabini ni siquiera pudo nombrar a su Secretario Privado, ocupando dicho lugar el mismo que era de Vischi. De esta forma el margen de maniobra del Intendente actual quedó totalmente acotado a lo antes dicho, salarios y protocolo.

En los últimos días se concretó un nuevo hecho que marca claramente la corruptela que impera en la comuna y que Tarabini ha heredado, cuando la Comisión Coordinadora del Carnaval, compuesta exclusivamente por funcionarios de la gestión de Vischi, luego de otorgar, mediante licitación pública, el sonido del Carnaval a la Empresa Master Sonido, volvió sobre sus pasos desconociendo a quien realmente había ganado, para contratar el sonido con la empresa Sonido Vignolles, propiedad de un funcionario municipal de Bromatología quien además es funcionario, con cargo de oficial, de la Policía de Corrientes, y que había sido la amplificación oficial de todos los actos municipales en los últimos 4 años de Vischi, el cambio ocurrió luego de supuestas amenazas efectuadas por el funcionario municipal de presentar documentación que involucraba a miembros de la Comisión y otros funcionarios municipales en negociados en compras de equipamientos en el exterior y que se sobrefacturan al vendérselos a la municipalidad. Nunca se oficializaron dichas denuncias, quedó en eso amenazas solamente, pero bastó para que desde la municipalidad se volviera atrás con el sonido.

Esta verdadera extorsión, ya que la misma tiene que haber existido sino no se hubiera cambiado a la empresa, no debía ser tolerada por el Intendente, la aceptación implícita del hecho demuestra fehacientemente que las segundas líneas pueden más que el intendente y muestra claramente que esa verdadera organización que se conformó dentro de la comuna para hacer negocios para los amigos y allegados está lejos de ser desmantelada, al menos mientras sigan los funcionarios de gabinete que responden a Vischi y que siguen tratando a Tarabini como concejal.

Si el Intendente no se pone las pilas y no evita que en su gobierno existan amenazas y extorsiones, pasará a ser parte, por acción u omisión, de esa organización ¿delictiva?, que recibió como herencia. Los tiempos de la sonrisa y el dedo pulgar en alto ya pasaron, ahora es el tiempo de las responsabilidades. La continuidad de una gestión no significa que todo siga como antes, bajo ningún punto de vista “El Profe” puede tolerar que lo llevan de las narices o que sea el Chirolita de Vischi, Sincovez o Prado. Debe empezar una nueva gestión, con los mismos lineamientos si los considera necesario, pero no puede continuar con lo mismo que se hizo durante 8 años.

Tal vez sin darse cuenta el intendente está haciendo justamente lo que espera la organización que haga, visitar las obras, pero sin ordenar cambios en las mismas, visita y preocupación por los problemas energéticos pero sin exigir la solución a tal punto que el transformador que se quemó el 29 de diciembre todavía no fue remplazado, proponer que no haya palco oficial y que los funcionarios paguen sus entradas en los corsos al igual que el año pasado, mientras que permite que se sigan haciendo los negociados en la municipalidad. Todas estas actitudes buenas por cierto son la distracción para que no se involucre en el estudio de los números municipales y en los “Kioscos”.

A este respecto si Tarabini piensa mantener su compromiso de terminar con dichos Kioscos, llevar una gestión honesta, libre de sospechas, solamente lo podrá hacer cuando entienda que el Intendente es él y nombre a funcionarios de SU confianza, no de otro. El pueblo está esperando esta reacción de Raúl Tarabini, si no lo hace, y en lo inmediato, la corporación se lo llevará puesto.
www.surcorrentino.com.ar


Lunes, 6 de enero de 2014