Por Carlos Pérego (6-3-14): Los últimos acontecimientos que tuvieron como protagonista al Gobernador Ricardo Colombi, peleas con el municipio de la capital provincial, con la nación, con los gremios, amenazas a los docentes, amenazas con denunciar el Financiamiento Educativo, emitir bonos, en fin en cada palabra, en cada frase, en cada actitud, demuestra que padece de un grave trastorno de personalidad, padece de un narcicismo agudo, puesto que se pone permanentemente en un plano superior a los demás, no tolera ningún tipo de críticas, exagera permanentemente sus logros hablando de ellos a fin de que lo elogien y admiren, razón por la cual se rodea de una corte de aduladores que pretenden sus favores, Colombi considera que debe ser tratado de un modo especial por todo el mundo por lo que a quien no accede a sus caprichos busca perjudicarlo a cualquier costa.
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El trastorno, que padecen muchos políticos por cierto, en el Gobernador Ricardo Colombi se agudiza notablemente a partir del comienzo de la campaña por su reelección, cuando emprende una verdadera guerra contra su contrincante, Camau Espínola, en donde no hesitó en apelar a cualquier artilugio para ello, de hecho comenzó una verdadero periplo nacional en busca de apoyo, no solo ya para su reelección sino para posicionarse como un referente de la oposición nacional con vistas a las presidenciales del 2015, razón por la cual, y a sabiendas de la imposibilidad de hacerlo, amenazó con la emisión de bonos con la sola intención de imponerse por sobre otros gobernadores presidenciables, en el hecho de querer demostrar que a pesar de las leyes él está por encima de las mismas, característica propio del delirio narcisista que padece.

A su vez, en plena campaña, como estrategia de la misma impulsó una revalorización del “coraje” de los correntinos e irguiéndose en el “más corajudo de ellos”, intención aplaudida y reinstalada permanentemente por sus acólitos, Vaz Torres, Sergio Flinta, Eduardo Vischi y Carlos Vignollo entre otros, quienes catalogaron al mandatario provincial como el único gobernador que se anima a decirle las cosas a la Nación, o que dice los que otros mandatarios provinciales no se animan, mostrando la creencia de superioridad de Colombi. Una muestra de las relaciones con su entorno que suelen describir sus relaciones con el narcisista como de amor-odio, porque al mismo tiempo que se sienten explotados pueden sentirse atraídos por su encanto.

Contradicción manifiesta la de Colombi puesto que para él los correntinos corajudos eran solamente quienes podían apoyarlo, no así aquellos que querían un cambio de gobierno, tergiversando, mal usando y desvalorizando la verdadera historia del coraje guaraní que caracterizó a los correntinos en la historia de nuestro país, desde la independencia hasta Malvinas, donde se puso de manifiesto verdaderamente ese coraje.

El triunfo electoral potenció a alturas inéditas ese sentimiento de superioridad, lo que llevó a que comenzara a manejarse como un patrón de estancia y no ya como el mayordomo, sintiéndose imbuido de la suma del poder total, al punto de desconocer hechos y acuerdos efectuados por sus hombres más cercanos, como todo el avance de las relaciones entre el municipio capitalino y la provincia cuando estaba a cargo del gobierno Gustavo Canteros, el vicegobernador, relaciones que se encargó de torpedearlas ni bien regresó de sus placidas vacaciones en Punta del Este, junto a Vaz Torrres y Sergio Flinta, con la intención de doblegar y hacer arrodillar al Intendente Fabián Ríos, a quien ve como un impedimento a sus aspiraciones totalitarias y de manejo absolutista, este hecho muestra claramente que Colombi es súper sensible a las críticas que le generan incertidumbre por lo que busca confirmar su superioridad, mostrando otra de las característica de este trastorno .

Con respecto a las críticas y a su no tolerancia a las mismas se debe recordar cuando en plena campaña electoral hizo detener a un ciudadano en Mercedes por criticarlo en un medio radial, o la situación vivida por periodistas de un canal de televisión a quienes mandó a detener por efectuar filmaciones a sus propiedades en Mercedes y Corrientes, yendo un poco más atrás cuando mandó a “agarrar una pala o un rastrillo” a quienes se oponían a su intención de entregar la cuenca del arroyo Ayuí para que Clarín y Soros construyeran una represa, o cuando visiblemente “sacado” en un congreso partidario, refiriéndose a Nito Artaza, le enrostraba “yo no me manejo por el Twiter, el Facebook o la Pu… madre que lo parió”, que muestran a las claras la intolerancia a las críticas por lo cual tiende a acallarlas por cualquier medio, policial, judicial, descalificación o hasta el insulto de barrabrava. Los Narcisistas suelen ser groseros, violentos, esperan que los demás los traten del mejor modo posible, pero no hacen lo mismo con los demás, quieren que sus relaciones sean a su conveniencia y que todos se dobleguen ante sus deseos

Con los sucesos del comienzo de clases, el acuerdo logrado con los gremios más cercanos al gobierno, recordemos que SUTECo fue retirado de dicha reunión por estar en desacuerdo con una recomposición salarial que no es tal, tan solo el blanqueo de sumas pagadas en negro, que resultó en un paro altísimo acatamiento decretado por SUTECo, que dejó en falsa escuadra al mandatario ya que a pesar de las amenazas anteriores a la medida de fuerza los docentes en amplia mayoría, inclusive los de los gremios que firmaron, manifestaron su desacuerdo con el arreglo logrado, mostrándole que sus caprichos e intenciones de manejar a todo el mundo con “el chicote” no le dieron resultado, ante ello muestra su costado más intolerante da otra vuelta más de tuerca y vuelve a amenazar, no ya solo con los descuentos a quienes hicieron paro, sino con volver atrás con el convenio firmado por los gremialistas cercanos al gobierno, e inclusive llegando a expresar su intención de analizar la conveniencia de regresar al Estado nacional el sistema educativo transferido en los años 90 a las provincias, lo que de hecho es imposible de hacer si no media una ley que retrotraiga la situación a más de 20 años atrás, esto solamente lo hace para generar inquietud entre los docentes. Todas estas situaciones se enmarcan en la característica del narcisista de suponerse omnipotente llevándolo a ser, en sus relaciones con las demás personas, un explotador porque considera que los demás están ahí para atender sus necesidades y no tienen ningún problema en aprovecharse de ellos para alcanzar sus objetivos, justamente se aprovechó de los gremios menos combativos en su lucha con los más afines a las políticas nacionales.

En narcisista en el trabajo puede ser incansable, aunque su objetivo es el reconocimiento personal, Ricardo Colombi es uno de los políticos que más ha recorrido la provincia. No le gusta ser subordinado, sino tener el poder, que utiliza para explotar a los demás, de hecho la intolerancia con que se maneja en todos los ámbitos, negando inclusive la realidad o tergiversando los hechos en pos de mantener ese poder, considerando que está por encima de las leyes que solo existen para los demás. En este sentido se puede decir que en aras de mantener dicha concentración de poder llegó a dirigir inclusive decisiones del Poder Judicial, manteniendo jueces adictos y evitando que se lleven a cabo las decenas de juicios políticos que pesan sobre dichos magistrados.

Sin dudas este simple pantallazo sin el rigor de un profesional médico, tomado desde el punto de las coincidencias entre las características del trastorno de personalidad llamado Narcisimo y las características personales del Gobernador Ricardo Colombi, las mismas se encuadran y coinciden con las peculiaridades de dicha anormalidad en la mayoría de los puntos, el problema del trastorno psicológico se agudiza cada vez más, el lector se preguntará el final de esta historia o las consecuencias de dicha perturbación, solo podemos comentar que Narciso, viene de la mitología griega, fue un joven que se enamoró tanto de su persona, se consideraba único, que al ver un día su imagen reflejada en un estanque, se quedó tan absorto mirándose que murió de inanición puesto que nunca pudo dejar de admirarse, nuestro gobernador por cierto no dejará de alimentarse pero esa su manía de imponerse a cualquier costa por sobre los otros llevará seguramente, en algún momento, a que cometa un error irreparable y los correntinos, aquello que son corajudos como él y los que no, serán las victimas.
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Jueves, 6 de marzo de 2014