Corrientes (21-10-14): Federico Alderete, hallado culpable del asesinato de su novia, Valeria Romero Azar, fue trasladado a la Unidad Penal Nº 1 para cumplir su condena. Desde el Servicio Penitenciario Provincial (SPP) confirmaron la información, pero negaron que el convicto tenga privilegios dentro de la cárcel ubicada por Avenida 3 de Abril 54. Qué celda VIP le vamos a dar, si el Penal no tiene suficientes celdas para alojar a los internos. No hay espacio disponible, afirmó una autoridad.

Según el SPP, Alderete fue remitido el pasado viernes en horas de la tarde desde la Unidad Penal Nº 6 de San Cayetano. Fue un traslado normal. Se trata de una persona que tiene una condena firme y por su situación procesal debe estar alojado en la cárcel para condenados, explicó a NORTE de Corrientes el subjefe de la fuerza. Alderete fue alojado en una celda con otros reos.

La Unidad Penal 1 tiene celdas con capacidad para tres internos, pero en general conviven cuatro o cinco en cada celda. Hay unas un poco más modernas que tienen 8 o 9 años que son para cuatro internos, refirió la autoridad consultada.

No obstante, aclaró que si existe al riesgo de daño para con algún preso se lo ubica en el pabellón de aislamiento para resguardar su integridad física. El pasado abril el Superior Tribunal de Justicia (STJ) confirmó la pena a 18 años de prisión para Alderte por el delito de homicidio simple agravado por la comisión con arma de fuego (art. 79 en relación al art. 41 bis del Código Penal) en perjuicio de Romero Azar.

El fallo dejó firme la condena y motivó que a principios de junio, el hombre, que por entonces estaba detenido en la alcaidía de Paso de los Libres, iniciara una huelga de hambre.

Me abstendré de ingerir alimentos hasta que el STJ resuelva el recurso extraordinario federal y que el mismo tome curso legal hacia la Corte Suprema de la Nación, y se me permita estudiar, dijo Alderete en una nota publicada en el perfil de Facebook de su madre. Días después y con unos kilos menos, por orden de la Justicia el imputado fue llevado hasta la Unidad Penal Nº 6. A mí la sentencia no me trajo felicidad, sino paz.

Sentí que hice todo lo que se podía haber hecho por Valeria contó su madre, Rossana Azar, en una nota publicada el domingo en el suplemento La Correntina.

Martes, 21 de octubre de 2014