Jugaba bien en Córdoba y merecía más que la mínima diferencia que había sacado en el primer tiempo con un gol de Sava. Pero no cerró el partido y ahí Belgrano alcanzó el empate a través de Gigli, después de un error defensivo. Fue 1 a 1, en definitiva, y ahora la permanencia en Primera se definirá el próximo domingo en Avellaneda, donde los locales tendrán ventaja deportiva por ser de Primera.
Ilusiones, adrenalina, nerviosismo. Emociones similares en realidades bien distintas. Belgrano de Córdoba y Racing se enfrentaron en el estadio Olímpico con el mismo objetivo: estar en la Primera División la próxima temporada. Fue el primer chico de esta llave de la Promoción (la otra fue 1-1 entre Unión y Gimnasia de Jujuy) en el que se juega mucho y a la vez se suele especular demasiado.
Racing ejerció el papel de defensor de la categoría y por eso dominó en los primeros minutos de juego. Sin embargo, El Pirata no se achicó ante el avance académico y con la contra pegó bastante, aunque en el arranque ninguno tuvo situaciones de gol como para preocupar al rival.
A los once minutos, Gustavo Bassi tuvo su primera situación conflictiva en el partido, cuando Matías Suárez se tiró en el área chica ante el roce del arquero Martínez Gullota. Sin embargo, el delantero de Belgrano –a pesar de la queja de los locales- estaba inhabilitado por offside.
Acto seguido, el árbitro no vio dos penales claros a Yacob por parte de Lollo, quien le dio al mediocampista de Racing dos puñetazos. Pero el equipo de Avellaneda no se dio por vencido y a los 15 minutos Franco Sosa metió un pase perfecto para que el Colorado Facundo Sava baje la pelota de pecho y la clave cruzado, al primer palo del arquero Olave.
Tras el gol, el equipo de Juan Manuel Llop creció y se hizo amo y señor del juego. Relegó a Belgrano y lo sometió a sus continuos ataques. Estuvo cerca de aumentar la ventaja pero infortunios del fútbol dijeron "presente". Postes, travesaños y, a veces, la aparición de Olave le negaron el 2-0. Como fue a los 26 minutos, cuando tres palos le dijeron que "no" a Matías Sánchez y a Edwin Avalos, en dos oportunidades.
A dos minutos del final de la primera etapa, Racing podría haber anotado en una de las situaciones más claras del encuentro. La aparición de Shaffer por izquierda derivó en un tiro al arco del zurdo que pegó en el ángulo marcado por la unión del poste y el travesaño. La Academia era mejor y justificaba su victoria parcial.
El segundo tiempo tuvo un tibio arranque. Racing generó mejores situaciones en la primera mitad, pero le dejó varios espacios al equipo de Mario Gómez que tuvo algunas chances interesantes de anotar el empate, sobre todo por el ingreso de Gigli para acompañar a Suárez en ataque. Por ejemplo, alrededor de los 20 minutos, cuando éste último enganchó en el área, dejó desparramados a dos defensores y le dio al arco, aunque desviado.
La revancha de Belgrano no tardó en llegar. A los 31 minutos, Cáceres despejó mal una pelota, que impactó en Bustos y le quedó justo a Gigli, quien no perdonó a la Academia –y su mejor manejo del partido- y anotó el empate en un partido que Racing tenía controlado.
Pero no era la noche de la Academia. Una vez más un palo ahogó el grito de gol del hincha. En esta ocasión, a falta de seis minutos del final, Caballero remató fortísimo al lado derecho de un Olave estático pero el poste del arco se interpuso entre la pelota y la red. Sava tomó el rebote en posición adelantada.
Es cierto, el empate es bueno. Pero Racing merecía mejor suete porque fue el equipo que más intento en los 90 minutos de juego. Cabe recordar que el empate llegó por una aislada desconcentración de la defensa. El domingo, desde las 15, se definirá el dilema. ¿La Academia se quedará en Primera? ¿O será Belgrano quien retorne para quedarse por un buen tiempo?
Jueves, 26 de junio de 2008