Corrientes (20-11-15): Este domingo 22 cuando todos vayamos a las urnas nuevamente para definir quién será nuestro presidente por los próximos cuatro años, los trabajadores del ámbito rural tendrán en sus manos una definición importantísima, en cuanto a la defensa de sus derechos y quienes, según su elección, serán los que mejor los interpreten, defiendan y amparen.

Por un lado se encuentran las políticas que se han venido desarrollando en los últimos años, particularmente el nuevo estatuto del peón rural establecido por ley 26.727 a partir del 2011, y la creación del RENATEA, como organismo para mediar entre las relaciones laborales del ámbito rural, pero con la decisión política de posicionarse siempre en defensa del sector mas débil o desprotegido a lo largo de la historia, o sea del lado de los trabajadores. En la otra vereda se encuentra la otra opción, que detrás del slogan de "cambio", propone de manera explícita, que el registro de los trabajadores agrarios vuelva a manos del Momo Venegas o sea del ex RENATRE, que vuelva a manos de quienes los "representaron" supuestamente por más de una década y sin embargo, jamás se posicionaron donde debían, jamás se pararon desde los zapatos de los trabajadores si no que por el contrario se sentaban a brindar en la mesa de las patronales y a recibir las ordenes que estas les imponían a cambio de vaya a saber que…luego quienes pagaban las consecuencias de estas conductas no eran otros que los trabajadores.

La propuesta de la alianza Cambiemos para controlar la situación laboral de los cientos de miles de peones rurales, es entregarle nuevamente la fiscalización a Gerónimo “Momo” Venegas y a las patronales del sector, tal cual ocurría previo a la creación del RENATEA. La vuelta del control a Venegas figura en la propuesta 13 del PRO…Hagamos memoria entonces…Del total de peones que figuraban en el registro que manejaba Gerónimo “Momo” Venegas, sólo el 42 por ciento tenía aportes registrados por la AFIP. Es decir, la tarea de control del organismo que conducía el Momo junto a la Sociedad Rural, CRA, Coninagro y FAA, era casi nula, a pesar de contratar a una empresa para la fiscalización por 10 millones de pesos.

Desde que el Estado retomó la potestad de controlar el trabajo rural, a fines de 2011, la ecuación cambió: Se registró a mas de 155.000 trabajadores rurales, y del total de peones con libreta, el 84 por ciento tiene aportes registrados por la AFIP. El otro cambio sustancial desde la creación del RENATEA, fue la detección y asistencia a 877 trabajadores en situación de trata y/o reducción a la servidumbre y 68 niños y niñas en situación de explotación infantil. Venegas no sólo no controlaba a las empresas sino que nunca realizó denuncias penales por casos de explotación laboral. Otro detalle, la gestión estatal del RENATEA capacitó a más de 11.000 peones rurales en distintos oficios y especializaciones para su recalificación laboral, por otra parte, alfabetizó a mas de 3600 trabajadores del interior profundo.

Venegas, antes, no solo tenía el manejo del registro sino que además "administraba" la obra social del sector OSPRERA y el sindicato UATRE, recordemos que estas dos últimas instituciones las continua manejando…Sí. Los de UATRE venían y arreglaban con los patrones. Por ahí alguien hacía la denuncia y le decían al patrón “ése te denunció”. Y se iban y nosotros nos quedábamos igual - este es el testimonio de José, un tarefero de la provincia de Misiones, al ser consultado si alguna vez escucho hablar del sindicato que "aparentemente" los representa.

“En estos años se avanzó mucho, sería un retroceso enorme volver al RENATRE, manejado por Venegas y la Sociedad Rural. En poco tiempo se hicieron más fiscalizaciones que las realizadas por el Momo en diez años, gracias a la nueva ley del peón rural. No podemos retroceder”, sostuvo Roque Pereira, integrante del sindicato de tareferos.

El domingo los trabajadores agrarios, frente a las urnas, definirán su futuro con su elección, y seguramente la memoria colectiva los hará ver con claridad quien es quien.

Viernes, 20 de noviembre de 2015