Nunca hay que abrir el disco duro ni, si se utiliza un software de recuperación, sobrescribir datos.

Cuánta información valiosa guarda un ordenador y qué fácil es perderla. Una caída de tensión por una tormenta, una inundación, un virus o un error de hardware o humano podrían inutilizar el disco duro o impedir el acceso a él. Los datos que guarda quedarían escondidos para siempre si no fuera por las nuevas técnicas que se desarrollan para la recuperación de información. Existe una estrategia para cada caso, aunque todo el mundo puede seguir unos consejos generales si algún día se enfrenta a este problema.
Luis Suárez, coordinador de investigación de la compañía RecoveryLabs, especializada en rescatar datos de dispositivos electrónicos dañados, explica que lo más importante es mantener la calma y ser consciente de las propias limitaciones. "Hay personas que empiezan a tocar el ordenador, lo desmontan, instalan programas, mil cosas, y al final lo único que consiguen es empeorar la situación", dice. Si no se está completamente seguro de lo que se hace las pocas posibilidades de recuperar esa información se esfuman. Como muy pocos guardan una copia actualizada de sus datos, a menudo hay que utilizar un software específico para hallarlos o extraer el disco duro y procesar los datos con herramientas especiales.
Los softwares de recuperación de datos funcionan en determinadas ocasiones, pero, según Suárez, hay un fallo muy común entre las personas que los utilizan: los archivos que se rescatan se vuelven a grabar sobre el mismo volumen. "Cuando sucede esto, que se sobrescriben archivos, los datos se vuelven irrecuperables; lo correcto sería grabarlos sobre otro disco duro o sobre otra partición del mismo disco", indica. Otro error frecuente está en la manipulación del disco duro. Estos dispositivos están sellados para que el ambiente interno en el que trabajan no se contamine, "por eso no debemos abrirlo bajo ningún concepto". Se podría ensuciar y las posibilidades de perder los archivos crecerían.
En RecoveryLabs explican que los casos más difíciles a los que se enfrentan son los relacionados con las apertura de discos duros. Para evitar que se ensucien sólo se deberían manipular en un ambiente limpio, en habitaciones limpias especialmente habilitadas para ello. El calor que han de soportar los ordenadores también causa numerosos incidentes. Una manera de prevenirlo sería instalar un programa que monitorice toda la actividad de la máquina, como el estado de los ventiladores internos y la propia temperatura del aparato. Speedfan es uno de ellos.

Viernes, 11 de julio de 2008